Media Maratón de Melilla, Melilla, España. 16 de noviembre de 2025.
Corrimos entre los Regulares del Ejército Español en la Ciudad del Deporte, Melilla. Una media maratón llana y muy bien organizada que permite correr a lo largo de una de las fronteras más tensas del mundo, protegida por una alta valla. Una gran carrera con un sabor único: el de una ciudad española en África.

TLDR; “demasiado largo, no lo leí”
- ¡Solo quiero correr! Llévame a CORRER.
- Tengo 1 minuto. Llévame a INFORMACIÓN ÚTIL.
- Correr es mi excusa para viajar. Llévame a VIAJE.
- Correr es mi excusa para comer. Llévame a CARBOLOADING.
- Quiero saber qué leer en el avión. Llévame a UN LIBRO.
🌍 El viaje 📷
Tenía mucha curiosidad por descubrir Melilla, una de las dos Ciudades Autónomas de España, situada en el norte de África. Melilla tiene aeropuerto, pero decidimos llegar por mar. Fuimos en coche hasta Motril, en Almería, y allí tomamos el ferry.

Viajamos en autocaravana y disfrutamos parando y descubriendo nuevos lugares increíbles en España. Vivimos en uno de los países más bellos, diversos y culturalmente ricos del mundo, así que nos encanta viajar en autocaravana, parar en algún sitio y explorarlo a fondo.
Cómo llegar: Hoces de Cabriel, Cuenca
Primera parada, Hoces de Cabriel, en Cuenca.
Pasamos la noche aquí y disfrutamos de una carrera de 5 km en la Reserva Natural. Corrimos frente a una gran presa e incluso vimos cabras montesas que cruzaron el camino mientras corríamos.

Luego condujimos hacia el sur durante unas horas más, paramos en Manchareal, Jaén, durante un día para visitar a la familia y finalmente dejamos nuestra autocaravana en Motril, Granada.
Ferry Motril a Melilla
Tomar el ferry de Motril a Melilla es una aventura en sí misma ⛴️.
El viaje por el Mediterráneo ofrece impresionantes vistas de la costa, y la emoción aumenta a medida que la ciudad se va haciendo visible. En nuestro viaje, el ferry iba lleno de militares, incluyendo miembros de la Legión, la famosa unidad del ejército español 🇪🇸.

Ver a los legionarios con sus uniformes distintivos, incluido el chapiri, con su presencia disciplinada y camaradería, realmente agregó un sentido de historia y tradición al viaje.
La Legión es conocida por su riguroso entrenamiento, su reputación de valiente y sus peculiares costumbres. La más famosa es su mascota, una cabra viva 🐐, que acompaña desfiles y ceremonias.

Fue fascinante presenciar de cerca una parte tan importante de la cultura militar española mientras nos dirigíamos hacia la ciudad fortificada, sabiendo que la historia y la defensa de Melilla siguen muy vivas hoy en día.
Aunque no vimos las murallas desde el mar, ya que llegamos a las 6 de la mañana y todavía estaba oscuro.
Llegada a Melilla
Dejamos el equipaje en el hotel. Melilla es lo suficientemente manejable como para no necesitar coche. Caminamos mientras disfrutábamos de un hermoso amanecer.
Después del desayuno, salimos a explorar la ciudad.
Feria del corredor
Pero primero fuimos al Hotel “Puerto de Melilla”donde se celebraba la Expo.

El hotel era uno de los más grandes y elegantes de Melilla (aunque nos alojamos en el Parador ¡Y nos encantó! Ofrecían salida tardía gratuita, vistas increíbles de la ciudad y un restaurante estupendo.
La Expo era lo suficientemente grande para una carrera pequeña. Tenía dos stands comerciales: uno de zapatillas y otro de productos proteicos. No había colas. Ni siquiera para sacarse una foto delante del photocall con el mural de la Media Maratón de Melilla y los patrocinadores.

Fuimos directamente al mostrador de 21k donde jóvenes locales nos entregaron nuestra "bolsa del corredor".
El paquete para corredores incluía los dorsales, una camiseta (de talla grande, ¡la mía era XS y me quedaba enorme!), un par de geles y un par de barritas de proteínas. Además, unos imanes muy prácticos para sujetar el dorsal. Aunque, para la carrera, optamos por los imperdibles tradicionales, ya que en Tokio 2024, donde también te daban imanes, vimos muchísimos en el suelo durante la carrera…
🌍 El viaje 📷Qué ver en Melilla en un par de días
Con nuestros dorsales y camisetas, fuimos a hacer turismo.
Cuando explores Melilla, el turismo es una mezcla de historia, cultura y vistas impresionantes 🌆.

Una visita obligada es la Plaza España, el vibrante corazón de la ciudad, repleta de cafés, tiendas e impresionantes edificios modernistas de principios del siglo XX. Es el lugar perfecto para observar a la gente, disfrutar de un café o asistir a eventos y festivales locales ☕🎉.

No muy lejos de allí, la Plaza de las 4 Culturas refleja la identidad única de Melilla, celebrando la herencia española, judía, hindú y musulmana de la ciudad. Un auténtico testimonio de siglos de convivencia 🕌✡️🕉️✝️.

La plaza está rodeada de edificios de impresionante arquitectura, cada uno de los cuales representa las tradiciones de su respectiva comunidad, convirtiéndola en un museo viviente de armonía cultural.
La joya de la corona de la historia de Melilla es Melilla la Vieja, la antigua ciudad fortificada.

Caminando por sus gruesos muros de piedra y calles empedradas, uno puede imaginar a los soldados, comerciantes y piratas que antaño defendieron este estratégico puerto mediterráneo.

En su interior, los cañones históricos, las torres de vigilancia y los estrechos callejones están llenos de historias que esperan ser descubiertas 🏰.
Las Cuevas del Convínico
Incluso exploramos Las Cuevas del Convínico, cuevas ocultas dentro de la fortaleza que alguna vez fueron utilizadas por monjes y más tarde como refugios.

¡Una parte fascinante y misteriosa de la ciudad vieja a la que puedes entrar!
Si quieres visitarlo, asegúrate de reservar, ya que solo se puede acceder con reserva previa. ¡Y, además, es gratis!

Para una experiencia más contemporánea y políticamente cargada, es difícil pasar por alto la valla fronteriza con Marruecos.
La barrera, fuertemente fortificada con múltiples capas y sistemas de vigilancia, ha estado en las noticias recientemente debido a las presiones migratorias, los intentos de cruzar y los enfrentamientos ocasionales.

Verlo en persona da una idea real de la compleja realidad moderna de Melilla 🌍🚧, resaltando la posición única de la ciudad como enclave europeo en el norte de África, yuxtapuesta a su rico patrimonio histórico y cultural.
¡Nos alegró comprobar el recorrido y ver que correríamos junto a la valla durante la carrera!
🏃♀️ La carrera 🏃♂️
La media maratón iba a empezar a las 10 de la mañana, no demasiado temprano. ¡Bien!
El evento contó con 4 carreras: una mini maratón para niños, una carrera de 5 km, una de 10 km y una media maratón.
Los corredores de la media maratón llevaban nuestros dorsales en negro, los de la carrera de 10 km en rojo y los de la de 5 km en verde. ¡Y podías personalizar tu dorsal, así que el mío ponía "The Running Ginger"!

La minimaratón debía comenzar a las 9:30 y así fue, muy puntualmente.
¡Estaba lloviendo! Pero a muchas personas no les desanimó el tiempo y llegaron a las 9:30 para apoyar a los niños.
La mini maratón
Nos encantó la "Mini maratón" donde casi cien niños de la localidad corrieron un kilómetro. ¡Fue tan tierno, tan divertido y, a la vez, tan inspirador! Incluso vimos a dos niños en sillas de ruedas. Los ganadores completaron el kilómetro en poco más de cuatro minutos, lo cual es impresionante, mientras que otros, más jóvenes, parecían perdidos. Algunos se lo tomaron muy en serio y todos esprintaron al principio y al final, ¡todavía no dominan bien el ritmo!
Cuando terminó la Mini Maratón y nos dirigíamos lentamente a la línea de salida para prepararnos para nuestra carrera, ya vimos a muchos chicos jóvenes y en forma con camisetas rojas: eran los “Regulares de Melilla”, que corrían la media maratón con las banderas de su cuerpo militar.

También vimos a otros hombres y mujeres con buen aspecto, muchos de ellos miembros de la policía o de la guardia civil.
Por suerte, dejó de llover sobre las 9:45, ¡así que pudimos correr toda la carrera con un tiempo perfecto! Además, no hizo sol, lo cual fue genial. El día anterior, sábado, hizo sol y sufrimos mucho con el calor.
¡Nos pusimos en marcha!
Comenzamos puntualmente a las 10:00 frente a un monumento dedicado a los caídos en acto de servicio. El ambiente era enérgico, vibrante y muy patriótico, con grandes banderas españolas.

El inicio no fue especialmente rápido, lo cual es bueno. Y era llano y pintoresco, con vistas a la Monumental Plaza de España, las murallas de Melilla la Vieja y el mar.
La única elevación era un puente que conectaba el puerto con el largo Paseo Marítimo frente a las playas. Dos rampas ligeras que tuvimos que pasar dos veces.

El tipo con la bandera corriendo descalzo
Delante de nosotros había un tipo que llevó una enorme bandera española durante los 21 kilómetros… ¡y corrió descalzo! Fue gracioso oír a algunos de nuestros compañeros corredores, que seguramente lo conocían porque lo llamaban por su nombre, bromear en voz alta: “¡Pondle unos clavos! ¡Y un poco de Fairy!”. ¡Eran muy graciosos!
También era bastante rápido. Creo que corrió en aproximadamente 1 hora y 45 minutos.
Los “Regulares”
Corrimos con grupos de Regulares con sus camisetas rojas. Mantenían el ritmo a la perfección. No demasiado rápido, pero constante.

Sólo unos pocos se quedaron atrás porque no pudieron seguir el ritmo, pero la gran mayoría corrió junta.
La ruta
La ruta constaba de dos vueltas, lo cual tenía sentido dado que la ciudad no es particularmente grande, por lo que se necesita creatividad para diseñar un recorrido de 21 kilómetros sin desniveles. La ruta evitaba las subidas, como la de Melilla la Vieja.

Es una buena ruta, con solo 8 metros de desnivel en total, y bastante pintoresca. Pasamos por las antiguas murallas de Melilla la Vieja, junto a muchas playas, el puerto y la frontera.

Correr junto a la famosa valla que habíamos visto en las noticias fue especialmente divertido. Por suerte, hoy no hubo incidentes y pudimos disfrutar de cada metro.
La salida y la llegada están en la Plaza de España, que es un lugar precioso y lo suficientemente amplio como para que no haya problemas.
Logística
Había suficientes puntos de avituallamiento con agua: solo se proporcionaba agua, pero dado que la ruta no era especialmente exigente, nos pareció suficiente.
Además, el tiempo estuvo genial para los que buscaban una mejor marca personal 🙂
Reyes Estevez intentando batir un récord
Con nosotros corrió Reyes Estévez, un famoso corredor de media distancia que nació en 1976. Fue un corredor olímpico de élite hace 30 años, y hoy en día es famoso por seguir siendo muy rápido a sus cuarenta y tantos.

Corriendo con el dorsal número 1, intentaba batir el récord de España para mayores de 45 años, que actualmente está en 1 h 5 min. Ganó la carrera, algo notable al competir con chicos de la mitad de su edad, pero no pudo batir el récord. Paró el cronómetro en 1 h 09 min. Aun así, ¡es una gran inspiración!
El final
En el kilómetro 19, un grupo de regulares nos adelantó. Les grabamos algunos vídeos con su bandera, mientras marchaban a paso firme. Íbamos más despacio que al principio, pero aún a buen ritmo, alrededor de 5:50 minutos por kilómetro. Luego, en el kilómetro 20, Roger sugirió que, como estaba bastante descansado, corriera más rápido para alcanzarlos y así poder grabar un vídeo.
¡Y así lo hice!
¡Corrí el kilómetro 19,5 al 20,5 en 4:30 minutos por kilómetro para llegar hasta ellos!

Además, cuando faltaban unos 500 metros para llegar a la Plaza de España, otro grupo de regulares, un poco más rápidos, esperaba al segundo grupo. Yo corría unos metros por delante de ellos y entré unos segundos antes, grabando un vídeo.

¡Fue una experiencia increíble! ¡Entrar con el ejército español “siguiéndome”!
¡Un minuto después entró Roger y yo estaba en la línea de meta para inmortalizar el momento!
Corrí en 2 horas y 1 minuto, segundo en mi categoría. No está nada mal teniendo en cuenta que me operaron de la espalda a principios de año.

Después de la carrera
Nos dieron agua, Powerade, naranjas y plátanos… ¡y las medallas… que eran enormes! De hecho, eran las mismas para todas las distancias, incluso para la “mini maratón”, ¡así que fue muy gracioso ver a los niños pequeños luciendo medallas más grandes que ellos!

“Sufre mamón” sonaba y el ambiente era festivo. Había muchas familias, muchas banderas españolas y muchos militares por todas partes. Incluso brillaba el sol.

En definitiva, recomiendo muchísimo esta media maratón. Sobre todo si buscas mejorar tu marca personal. Melilla se autodenomina "la ciudad del deporte" y, por lo que vimos, ¡hace honor a su nombre!
🍜 Carga de carbohidratos 🍝: Qué comer en Melilla si eres corredor.
Cuando entrenas en Melilla, puedes hacer que cargar carbohidratos sea parte de la aventura 🍽️. La mezcla de sabores españoles y amazigh de la ciudad te permite cargar energías con generosos platos de cuscús o pastela con sus capas hojaldradas, agridulces. Perfecto para reponer fuerzas antes del día de la carrera 😋.
Incluso algo tan sencillo como unas tortas de aceite locales o unas abundantes patatas con pimentón pueden darte ese subidón de energía que te deja listo para salir a correr. O una paella. ¡Nunca falla!

Después de la carrera, puedes optar por proteínas para recuperarte 💪. El ambiente costero de Melilla ofrece abundante pescado fresco a la plancha, y los pinchitos morunos son una apuesta segura. Brochetas especiadas que vienen genial después de un duro esfuerzo. También puedes optar por lomo de ternera para un suculento ponche de proteínas o huevos revueltos con jamón para algo rápido y saciante, como hicimos nosotros:

Acompáñalos con una ensalada fresca o verduras asadas para ayudar a que tus músculos se recuperen mientras sigues disfrutando de la rica cultura gastronómica de la ciudad 🌅.
Correr aquí no se trata solo de los kilómetros. También se trata de la comida.

Información útil
🏆 Media Maratón Melilla. Mini maratón (1 km), 5k, 10k y 21k.
🌐 Sitio web: https://melillaciudaddeldeporte.es/events/media-maraton-10-k-5-k/
🏃 Número de corredores: Aproximadamente 1000.
🗓️ Noviembre en Melilla, España.
👟 Urbano: trae zapatos para asfalto.
✅ Ambiente único que combina cultura, historia y aventura
✅ Un recorrido llano, rápido y pintoresco, perfecto para batir récords personales.
⚠️ ¡No es un trayecto fácil! Pero coger el ferry mola bastante 😝

Mapa


Un libro
“Imán”, de Ramón J. Sender
Un gran compañero para un viaje a Melilla es Imán de Ramón J. Sender, una potente novela ambientada en la Guerra del Rif y la presencia española en el norte de África.
Leerlo durante tu estancia enriquece aún más la atmósfera de la ciudad. Las calles estrechas, las murallas de la fortaleza y las vistas hacia Marruecos cobran mayor sentido al tener presente la vívida tensión histórica del libro. No solo entretiene; te transporta directamente al pasado de la región, haciendo que cada rincón de Melilla parezca parte de una historia más amplia.
También descubrirás que la novela te ayuda a apreciar la mezcla cultural de Melilla con mayor profundidad. Al explorar los edificios modernistas, saborear la gastronomía local o recorrer la costa, los contrastes y la coexistencia descritos en el libro resonarán con la ciudad que te rodea. Imán convierte tu visita en una especie de viaje literario en el tiempo, permitiéndote experimentar Melilla no solo como un destino, sino como un escenario cargado de historia, conflicto y resiliencia.
Perfecto para viajeros que disfrutan combinando historias con paisajes.

Resumen: Imán se ambienta en Marruecos durante la guerra colonial. Viance, el protagonista, es un joven aragonés, uno de los doscientos mil hombres que cruzaron el continente africano sin más horizonte que la mochila del hombre que tenían delante o la vanguardia improvisada de los cuervos. En su pueblo, a Viance le llaman “Imán” porque parece atraer la desgracia. Víctima de las injusticias sociales, los horrores de la guerra y la falacia que se esconde tras el brillante y ruidoso despliegue militar, simboliza el destino de todos aquellos obligados a luchar.
